ENTRANDO EN LA HABITACION DE UN DESCONOCIDO Mi llegada a S..

ENTRANDO EN LA HABITACION DE UN DESCONOCIDO Mi llegada a São Paulo brasil nunca había sido tan emocionante como lo fue esta ves, me contacte con unos amigos de aquí y me recomendaron un hotel gay muy famoso en la ciudad así que fui ella por un poco de diversión. Al entrar al hotel guarde mis ropa en una cabina guarda ropa y empecé a andar los pasillos oscuros del hotel buscando diversion, al llegar a uno de esos pasillos me encuentro a un chico en la entrada de su habitación masturbandose, lo mire fijamente hasta que el decidió entrar a su habitación y dejar la puerta abierta, Llego a su habitación y lo encuentro ya comido en la cama, me acerco para acariciarlo, esperando despertarlo a él y a su bestia dormida entre sus piernas. Meto mis manos debajo de las sábanas que lo cubren y comienzo a explorar su piel caliente. Lo toco superficialmente y el se estremece, apenas un poco de tacto y abre sus ojos, me recibe con una sonrisa. Reacciona un poco y me encuentra sobre el con las manos en la masa, hurgando en su intimidad. Meto su verga en mi boca y con suaves movimientos hago que se ponga dura, el me toma por la cintura y me pone en cuatro sobre la cama, y mete su lengua por mi culo caliente, mientras tanto frota su barbilla, eso me excita y me pone de cero a mil revoluciones. Enseguida me lleva a la parte superior de la cama, me coloca encima de él de manera invertida y comienza a chuparme el culo mientras yo le chupo la verga. Este es el 69 que cualquier desearía con Él. A continuación me arrastra al filo de la cama y me da unas cachetadas mientras se masturba, me penetra con determinación, me monta y me cabalga. Yo no puedo creer lo que está sucediendo, me giro para mirarlo a el, embelesado con mi culo, dándome y dándome sin compasión. Luego el me tumba sobre la cama, boca arriba, se masturba y yo abro mi culo con ambas manos para que se bote sobre mí. El se viene y pega un alarido, su semen me llega al culo y mi vientre. Entran unos vestigios de su leche tibia por mi culo. Definitivamente, fue la mejor aventura que hice en mi estadía aqui en São Paulo seguramente la volvería a repetir !!!